Me and my bloody luck.

 El plan era salir del Bosque sigilosamente, ir hacia la cabaña de Hagrid, contarle lo que había sucedido, y pedirle que lo dejara quedarse con él hasta que se levantara el toque de queda y pudiera volver a entrar al castillo. Preferiblemente sin que nadie lo viera en el intertanto. Sobre todo Filch. Así, todos pensarían que simplemente había salido a dar un paseo matutino, o algo por el estilo, y nadie tendría porqué sospechar nunca nada (excepto Harry, pero no importaba, porque tenía planeado contárselos a él y a Hermione de todas formas). Un plan sumamente sencillo, pensó enorgulleciéndose de su ingenio, sin complicaciones innecesarias ni trabajosas, justo como a él le gustaba...

Por lo tanto, por supuesto que algo tenía que salir mal. Su maldita suerte.  

( Continúa... )